El riesgo de polución química se cernía ayer en el área del sur de Estados Unidos azotada por la tormenta Harvey, tras explosiones en una fábrica cerca de Houston, la cuarta mayor ciudad del país y epicentro del desastre, donde las inundaciones comenzaban a retroceder.

Casi una semana después de que Harvey impactara en la costa estadounidense, funcionarios y voluntarios todavía luchan por rescatar a las víctimas de inundaciones sin precedentes, que dejaron al menos 40 muertos y causaron decenas de miles de millones de dólares de daños.

Aunque las aguas empezaron a descender en Houston, dando algo de alivio a sus 2,3 millones de habitantes, una preocupante humareda se produjo luego de una serie de explosiones nocturnas en una planta química inundada en Crosby, a 40 kilómetros al noreste de la metrópoli.

El grupo francés Arkema, que opera esta fábrica de peróxidos orgánicos usados en la elaboración de plásticos y productos farmacéuticos, ya había alertado de este peligro por el corte de electricidad, que impide la adecuada refrigeración de materiales “altamente inflamables”.

Como medida de precaución, las autoridades habían ordenado la evacuación de los residentes a menos de tres kilómetros de las instalaciones.

La Agencia de Protección Ambiental de EE.UU. (EPA) descartó por el momento señales de toxicidad peligrosa en la humareda, tras recibir información de una aeronave en la zona. “No hay concentraciones preocupantes por los materiales tóxicos reportados en este momento”, indicó la agencia en un comunicado.

Más de 30.000 personas se han refugiado en albergues en todo Texas, tanto en el enorme centro de convenciones de Houston como en pequeñas iglesias, según la FEMA.



Trágico paso de Harvey deja ya más 40 muertos

Las tareas de rescate siguen en numerosas localidades de Texas tras el paso del devastador ciclón Harvey, que ha causado ya más de 40 muertos y decenas de miles de desplazados.

En Houston, la ciudad más afectada y donde afortunadamente no ha llovido en las últimas 24 horas, más de 32.000 personas se encuentran alojadas en refugios temporales mientras prosiguen las labores de búsqueda.